Sugerencias para analizar resultados

¿Cómo revisar la información recopilada en las sesiones?

Cuando trabajamos con comunidades, los hallazgos son descubrimientos clave que nos permiten develar lo que realmente importa: inquietudes compartidas, necesidades que quizás no habíamos considerado o incluso ideas innovadoras que surgen de los propios participantes. Para que estos hallazgos sean aprendizajes valiosos para tomar decisiones, necesitamos organizarlos y darles sentido.

Dependiendo de la etapa en la que estemos, los hallazgos pueden abrir nuevas preguntas de investigación, confirmar lo que ya intuíamos o dar un giro inesperado a los proyectos.

Para aprovecharlos al máximo, es importante ordenarlos y analizarlos: agrupar temas recurrentes, identificar perspectivas novedosas y clasificar ideas según su relevancia y aplicabilidad.

Pasos para analizar los registros:
Mantén ordenados los registros

Revisa las sugerencias para registrar información

Asigna categorías generales

Agrupa la información en grandes temas, como:

  • Percepciones sobre…

  • Desafíos

  • Oportunidades

  • Propuestas de mejora

     

Etiqueta los fragmentos clave

Usa códigos o etiquetas para marcar temas recurrentes y facilitar su análisis. Puedes hacerlo en una planilla o con herramientas digitales especializadas.

 

Dale sentido y valor a la información

Una vez organizados los datos, identifica los aprendizajes más importantes. El objetivo final es transformar los registros en conocimiento útil que guíe la toma de decisiones y fortalezca las iniciativas comunitarias. ¿Qué es lo más relevante? ¿Qué citas o ejemplos ilustran mejor los temas identificados?

Incluye otras perspectivas

Para terminar, puedes analizar esta información con otras personas de tu organización, expertos o actores del territorio, para encontrar diferentes miradas.

 

¿Qué hallazgos encontraremos en cada fase?
Explorar los problemas
Diseñar las soluciones
Implementar las iniciativas
Evaluar las experiencias